Ya estamos viendo con nuestros propios ojos como los océanos, por ejemplo, están sufriendo de primera mano las consecuencias de este cambio climático. Todos estamos experimentando ciertas transformaciones y, aunque en ocasiones prefiramos no decir nada, en el fondo sabemos que no estamos haciendo las cosas como deberíamos ¿por qué? Porque hace mucho que tendríamos que haber puesto solución a todo esto.
Aunque también es cierto que cada vez son más los sectores que se están concienciando y el sector inmobiliario no podía ser menos. Y es que tienen un objetivo claro: impulsar la creación de viviendas sostenibles. Porque solo así conseguirán llegar a un mayor número de personas ya que la construcción de cualquier edificación, por pequeña que sea, tiene consecuencias perjudiciales para el medio ambiente. ¿En qué consisten entonces este tipo de viviendas? Son aquellas que reducen o suprimen el alto consumo energético, lo que provoca el efecto invernadero. ¿Cómo lo hacen? Pues utilizando recursos naturales como por ejemplo la luz solar.
Y es que si podemos entre todos conseguir frenar un poco este cambio climático mejor que mejor. Porque el objetivo es mantener las prestaciones de un domicilio convencional aunque con una diferencia clara, reducir hasta en un 80 por ciento el consumo eléctrico, algo que además también veremos reflejado en la factura de la luz.
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EL VALOR DE UNA VIVIENDA DE ESTAS CARACTERÍSTICAS
Porque no solo habrá que ponerse manos a la obra, también habrá que hacerlo en un sitio estratégico, en lugares próximos a establecimientos que nos ofrezcan los servicios básicos, por ejemplo. No nos valdrá cualquier ubicación ya que hoy en día se tiene muy en cuenta la proximidad a centros de salud, supermercados, colegios… ¿Por qué se demanda esta cercanía? Porque queremos eliminar, cuanto antes, el coche de nuestra vida. ¿Para qué queremos coger nuestro vehículo pudiendo ir en coche o incluso en bicicleta? Todo lo que podamos hacer para proteger nuestro planeta, bienvenido sea.
También se pretende que las viviendas sostenibles estén situadas cerca de zonas verdes que nos permitan tener un mayor contacto con la naturaleza y que nos aleje de ese núcleo urbano al que estamos acostumbrados. Siempre respetando el entorno durante la construcción, algo básico y fundamental.
Se utilizará además la energía de fuentes renovables ¿qué quiere decir esto? Que por ejemplo la energía que se recoge con la luz solar podría producir agua caliente por ejemplo. Todo es positivo si queremos conseguir ese ahorro que tanto necesitamos. También se emplearán otro tipo de energías como la geotérmica por ejemplo. Aunque las cosas cuanto mejor estén hechas, mayor será después el disfrute. Por eso también es conveniente insertar plataformas en las edificaciones y de esta manera transformar los recursos naturales en energía. Y todo esto, como no, se notará y mucho en nuestra factura de la luz. Porque parece una tontería pero nunca nos habíamos parado a pensar en todo lo que gastamos. No sabíamos hasta qué punto podíamos ahorrar y parece que poco a poco lo vamos descubriendo. Porque como bien dicen, más vale tarde que nunca ¿no?
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LAS VENTAJAS QUE TANTO DESCONOCÍAMOS
Y el hecho de construir una vivienda sostenible también implica utilizar materiales específicos que lo que hagan sea reducir la huella de carbono, empleando siempre materiales de baja energía. Y no solo por fuera, también por dentro. Tenemos que poner todo de nuestra parte para que nuestro hogar todo lo sostenible que se pueda. Por eso tendremos que tener en cuenta hasta el más mínimo detalle y eso pasa también por los electrodomésticos. No queremos heredar aquel microondas antiguo que estaba en casa de los abuelos. Queremos electrodomésticos eficientes que posean etiquetas energéticas que nos indiquen el consumo de energía.
También habrá que tener muy en cuenta los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) el sector se compromete a trabajar para conseguir un mundo más sostenible ya que, en definitiva, es lo que necesitamos. Porque entre todos podemos lograrlo solo hace falta que cada uno ponga de su parte y que cada sector haga también todo lo posible para colaborar en una lucha que es de todos.
Porque cualquier gesto, por pequeño que sea, nos hace también participes de un cambio que tenemos que conseguir. Porque nos estamos cargando el planeta y lo peor de todo es que hemos sido conscientes pero, como aquel que dice, hasta que no le hemos visto las orejas al lobo no nos hemos parado a pensar y a recapitular. Por eso hoy más que nunca es necesario que se haga algo para que nuestro planeta siga sumando y nunca más restando.
